Tener una temperatura agradable en el interior del hogar, es importante. Pero tengamos en cuenta que solemos pasar buena parte del día en edificios públicos o privados. Ya sea porque ahí trabajamos o realizamos algún tipo de trámite. Este tipo de edificaciones que suele tener o recibir a una importante cantidad de personas, necesita contar con aislamiento térmico. Esto beneficia no solo a los visitantes y usuarios, sino también a los dueños y administradores, además de al edificio en sí.
¿Qué es el aislamiento térmico de edificios?
Vayamos por el inicio, la definición de aislamiento térmico. Se aplica a la instalación o colocación de cerramientos utilizando materiales con capacidad aislante. Esto es, que pueden disminuir la transmisión de calor a través de dichos cerramientos. Un material aislante es aquel que tiene una muy baja conductividad térmica (capacidad de conducir el calor). En contraparte, esos materiales deben tener una alta resistencia o transmitancia térmica, que es como se mide su capacidad de aislamiento.
Existen entonces materiales aislantes con una muy baja conductividad térmica, que es igual o menor a 0,06 W/m-K. Tal es el caso del corcho expandido, la lana mineral, el poliestireno o el poliuretano, cuyos valores de conductividad térmica oscilan entre 0,049 y 0,035 W/m-K. Mientras que su resistencia va de 2,04 a 2,085. Para hacernos una idea, el adobe es un material no aislante, y su conductividad es de 1,1, mientras que su resistencia es de 0,09.
Por qué aislar térmicamente un edificio
Dicho lo anterior, hay también que señalar que un material aislante también tiene esa cualidad porque posee aire en su interior, lo cual es una barrera ante el calor. Entonces, cuando se aplica ese aislante a la fachada, techo y otras zonas que requieran aislarse en el edificio, la temperatura en su interior es más estable, más agradable. Esto trae como consecuencia un confort a quienes ahí trabajan para desempeñar mejor sus labores, así como para quienes acuden a ese edificio por cualquier otro motivo.
Pero eso no es todo, porque un edificio aislado térmicamente, tiene una mayor eficiencia energética que no necesariamente depende de su ubicación, materiales u orientación. Hay menos pérdidas de calor o frío en su interior, por lo que el consumo energético será menor. Además, evita la formación de condensación, humedad y moho, tan dañino para las personas como de forma estructural. Este aislamiento también reduce el ruido exterior e incrementa el valor añadido al edificio.
Fany SL: aislamiento térmico de edificios públicos y privados
Todo lo anterior es posible contratando a un especialista en aislamiento térmico y acústico. Somos Fany SL y realizaremos el aislamiento de tu edificio en la zona norte de España. De esta forma habrá una temperatura agradable con menos costes energéticos en cualquier época del año. Utilizaremos insuflado térmico de lana mineral o lana de vidrio, de celulosa, con bolitas EPS.
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